La cosa sigue fria
Parece que el grueso de la ola de frio con la que se ha inaugurado la primavera ha pasado. El sabado ha amanecido soleado y por la tarde nos damos una vuelta por los apostaderos de costumbre a ver como ha afectado el frio a nuestros barbos.
En el escenario de la entrada anterior, solo vimos uno y nada mas.
En las posturas del montorillo, tampoco hay mucha actividad. En las aguas someras próximas a la entrada del rio vemos algunos barbos que no logramos engañar.
A última hora, y siempre pescando muy muy sigilosamente tentamos dos barbos muy orillados. Uno parte el bajo de mi amigo Juan Antonio y el otro toma una imitación de quironómido casi suspendida en los juncos de la orilla. No noto la picada y solo tras un movimiento instititivo de la cáña se inicia la carrera del barbo.
Pese a ser un fuerte ejemplar que me ofrecha una valerosa pelea compruebo que su estado no es muy bueno, está completamente erosionado y ahora toca investigar el motivo.